SANTO DOMINGO.- El aire de Santo Domingo registra altos niveles de partículas contaminantes, fruto del impacto del sector transporte, por encima de recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para mantener un medioambiente sin riesgo severo para la salud, según un estudio difundido este miércoles.
Mientras la OMS establece en 10 µg/m3 el MP2.5 (material particulado con diámetro aerodinámico de 2.5 µm), los niveles detectados en Santo Domingo ascienden a 35.44 µg/m3, de acuerdo con la investigación “Combustibles y Vehículos más Limpios y Eficientes” del Ministerio de Energía y Minas (MEM) y organismos internacionales.
En cuanto al hollín o carbono negro, los niveles encontrados fueron de 14.75 (µg/m3).
En medio de la epidemia mundial por el COVID-19, este tema “posee aún mayor importancia y resulta en una mayor causa de preocupación”, consideró el viceministro de hidrocarburos, Alberto Reyes, al presentar los estudios al titular del MEM, Antonio Isa Conde, según una nota de esa institución.
Dentro de este proyecto se realizó también una investigación para el “Establecimiento de línea base para la economía de combustible de los vehículos ligeros 2005-2015”, que estableció que el consumo promedio de vehículos livianos en 2015 fue de 9.85 Lge (litros de gasolina equivalente/100 km), era ligeramente por encima de la media para Latinoamérica para el mismo año que fue de 9.50 Lge/100 km,.
Esta línea base línea base ha sido útil para conocer por primera vez el promedio de emisiones atmosféricas de los vehículos livianos en el país con base a 2015, que fue de 229 g de CO2 / km, y que está por encima de los países desarrollados -que en promedio es 150 g de CO2 / km- y de Latinoamérica, que promedió 180 g de CO2 / km, para el mismo año, de acuerdo con datos de ONU Ambiente.
El proyecto fue realizado por el MEM y contó con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (ONU Ambiente), la Iniciativa Global para la Economía de Combustible (GFEI), la Iniciativa combustibles y Vehículos Diésel limpios, la Alianza para Combustibles y Vehículos Limpios (PCFV).
Contó con el financiamiento de la Fundación FIA, la Unión Europea y el Fondo para el Medio Ambiente Mundial y con la asistencia de los socios técnicos de CEGESTI, de Costa Rica; y el Centro Mario Molina Chile (CMMCh) y localmente de J&J Consulting SAS.