Este miércoles 16 de septiembre se cumplió el primer mes de que el presidente Luis Abinader asumió el solio presidencial, luego de ser protagonista de una campaña electoral atípica, caracterizada por denuncias de fraude, el colapso del sistema de conteo electrónico y el montaje de unas elecciones extraordinarias en medio de una pandemia por el arribo del covid-19 al país.
En 30 días de gestión el gobernante agotó una apretada agenda en la que priorizó temas nodales como la salud, la educación y la economía.
La intensa agenda del mandatario abarcó la presentación de los planes de salud, educativo y de recuperación del turismo hasta viajes al interior para anunciar proyectos de gran impacto como el turismo en Pedernales y el Puerto de Manzanillo, en Montecristi, si como su más reciente visita a la provincia Santiago, donde anunció la realización de una serie de obras millonarias.
Desde que fue juramentado como presidente de la Republica Luis Abinader inicio un proceso de juramentación en la se destaca la ratificación en el cargo al gobernador el Banco Central, Héctor Valdez Albizu, debido a la crisis económica que afecta al país con lo que envió un mensaje de confianza a los agentes económicos.
El más llamativa designación fue la de Miriam Germán Brito como procuradora General de la República y Yeni Berenice Reinoso como procuradora adjunta, a quienes expresó “Quiero decirles especialmente a ustedes que a partir de hoy ustedes solo van a seguir instrucciones de la Constitución y de las leyes; ustedes tienen total independencia de acción para sus funciones, su guía serán solo cumplir la Constitución y las leyes de la República Dominicana”.
Igualmente sostuvo encuentros con el liderazgo político para consultarlos sobre temas de la agenda nacional, y varias reuniones con comunicadores sociales.
En el ámbito económico llama la atención la eliminación de instituciones como el Consejo Estatal del Azúcar, la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (OISOE), el Fondo Patrimonial a las Empresas Reformada (Fonper), el Despacho de la Primera Dama y el Fondo de Promociones a las Iniciativas Comunitarias (Procomunidad), así como la cancelación de cientos de funcionarios y empleados, catalogados de botellas, por presuntamente cobrar sueldos fabulosos sin realizar ninguna función en el Estado dominicano.
El tema que más ha ocupado la agenda en los medios de comunicación, ha sido las denuncias de supuestos actos de corrupción hechos por los funcionarios actuales a los ex incumbentes del pasado gobierno de Danilo Medina.
Acusaciones que provocaron la reacción el Partido de la Liberación Dominicana, quien calificó de irresponsables dichas denuncias, e instó al PRM a presentar pruebas.
Quizás ese emplazamiento sirvió de acicate para que la directora de Ética e integridad Gubernamental, Milagros Ortiz Bosch, y el director de Compras y Contrataciones Públicas, Carlos Pimentel, depositaran un expediente acusatorio contra varios funcionario por presuntas irregularidades en la compra de 11,500 millones de pesos de hormigones durante la gestión de Gonzalo Castillo en el ministerio de Obras Públicas.
Toca ahora, a los otros funcionarios denunciantes presentar las pruebas de los presuntos actos de corrupción y que el Ministerio Público actúe en consecuencia.
Pero no todo ha sido color de rosa en estos primeros 30 días, ya que pululan las quejas de varios dirigentes que todavía no han sido tomados en cuenta para ocupar cargos en la administración pública.
En ese sentido el presidente Luis Abinader advirtió que “Llegué por los perremeístas, pero soy el presidente de todos los dominicanos”.
Sin embargo, los dirigentes perremeístas deploran que se estén nombrando a personas cercanas al presidente Abinader, a quienes denominan los Riquitos, dejando sin empleos a los miembros del partido que se fajaron en la campaña electoral.
También ha surgido el temor de que la estructura partidaria quede desentendida, debido a que sus principales dirigentes han pasado a ocupar cargos importantes en el gobierno, el local luce vacío.
Este marte el presidente Luis Abinader presentó su declaración jurada de bienes y autorizó que durante su ejercicio gubernamental todo su patrimonio sea transferido y controlado por un Fideicomiso.
La Cámara de Cuentas había dado una prórroga hasta el 28 de este mes para la entrega del documento, pero el mandatario decidió no acogerse a la misma para entregarla dentro del plazo establecido por la Ley.
La Cámara de Cuentas debe determinar si el infirme financiero presentado por los funcionarios salientes y las autoridades entrantes son veraces, si no lo son, de nuevo, toca al Ministerio Publico actuar en consecuencia.