Santo Domingo, República Dominicana. El Banco Central de la República Dominicana (BCRD) informa que en el mes de abril de 2021 las remesas recibidas alcanzaron una cifra de US$910.8 millones, monto que supera en US$515.8 millones a las registradas en abril de 2020, mes que sufrió la mayor disminución en la recepción de remesas por la pandemia del COVID-19. De manera acumulada, entre los primeros cuatro meses del año, las remesas sumaron US$3,459.5 millones, US$1,361.3 millones por encima del mismo periodo de 2020, alcanzando un 64.9 % de crecimiento interanual.

Es evidente que uno de los principales factores que ha incidido sobre el comportamiento de las remesas es la mejoría de las condiciones económicas de los Estados Unidos (EEUU), donde reside la mayor parte de la diáspora dominicana. De hecho, desde ese país provino el 86.6 % de los flujos de abril. Vale resaltar que, previo a la pandemia, esta participación rondaba entre 75.0 y 80.0 puntos porcentuales.

Uno de los aspectos más relevantes de la economía norteamericana se refiere al empleo, cuyas cifras indican que al mes de abril se crearon 266 mil nuevos puestos de trabajo, registrando así una tasa de desocupación de 6.1 %, una ligera variación respecto al 6.0 % de marzo. De manera particular, el desempleo de los hispanos en EEUU se mantuvo sin cambio en 7.9 % en abril de 2021.

De igual manera, se mantiene la incidencia del “Plan de Rescate Americano” introducido por el presidente Joe Biden por un monto de US$1.9 billones, puesto en marcha el pasado mes de marzo, así como de los reembolsos de impuestos del gobierno estadounidense que se realizan durante marzo y abril de cada año.

 

 

Como se aprecia en la figura 3, además de los EEUU, en abril se destaca la recepción de remesas desde España en el orden de 6.1 %, país europeo con la mayor cantidad de migrantes dominicanos. Le siguen Haití e Italia con 0.9 % y 0.8 %, respectivamente. El resto de la recepción de remesas se reparte entre países como Suiza, Canadá y Panamá, entre otros.

 

Del total de las remesas recibidas, el Distrito Nacional obtuvo la mayor proporción, un 32.7 %, seguido por la provincia de Santiago y la provincia Santo Domingo, con un 14.8 % y 8.1 %, respectivamente. Esto indica que más de la mitad, un 55.6 % de las remesas, se recibe en zonas metropolitanas del país.

El mayor flujo de remesas, el aumento de las exportaciones, el proceso de recuperación que está mostrando el turismo gracias a las acciones que está llevando a cabo el gobierno en ese sector, más los nuevos proyectos de inversión extranjera directa iniciados por empresas en diferentes sectores de la economía; han contribuido con un mayor flujo de divisas al país. Esto, junto a la participación del Banco Central en el mercado cambiario a través de su Plataforma Electrónica de Negociación de Divisas, ha permitido mantener la estabilidad relativa del tipo de cambio, de tal manera que en el mes de abril la tasa de cambio se apreció un 2.2 % respecto a diciembre de 2020.

Asimismo, este mayor flujo de divisas ha permitido la acumulación de reservas internacionales en torno a los US$12 mil millones, aproximadamente un 14.7% del PIB y equivalentes a 7.4 meses de importaciones, superiores a las métricas recomendadas por el FMI, contribuyendo a que la República Dominicana mantenga una posición externa favorable con perspectivas de obtener un menor déficit de cuenta corriente en 2021, en torno al 1.5% del PIB.

En conclusión, es de esperar que las condiciones del sector externo dominicano seguirían siendo cada vez mejores, con las expectativas de crecimiento de la economía norteamericana de 6.4 % para este 2021, según el Panorama Económico Mundial de abril del FMI (WEO por sus siglas en inglés); y si, además, tal como lo declarara el New York Times, la República Dominicana es uno de los 4 países de América que lograría inmunizar a toda su población contra el COVID-19 en el 2021.

El Banco Central reitera que se mantiene alerta para seguir tomando las medidas necesarias que garanticen la estabilidad de precios y del mercado cambiario durante el proceso de reactivación que ha iniciado la economía dominicana.