MÉXICO. La violencia en el proceso electoral mexicano, que hasta ahora ha dejado al menos 130 muertos, no cesa a escasas horas de los comicios federales y locales de este domingo, con varios ataques a equipos de campaña.
El candidato por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la presidencia del municipio sureño de Tixtla, Saúl Nava Astudillo, denunció hoy que sujetos armados perpetraron un ataque a su domicilio durante la madrugada.
“Se escucharon percusiones de armas de fuego que impactaron en las paredes de la casa”, aseveró en una conferencia de prensa el candidato, quien dijo estar “consternado” por lo ocurrido.
El aspirante señaló que previamente no había recibido amenazas, y que denunciará los hechos ante las autoridades del estado de Guerrero para que se abra una carpeta de investigación.
Asimismo, el candidato denunció que se están dando acciones de hostigamiento por parte del Partido de la Revolución Democracia (PRD), hoy al frente de este municipio del estado de Guerrero, considerado como uno de los más violentos del país.
“Pedimos en su momento a todos los actores políticos que lleváramos a cabo una política digna, un debate (…) los sucesos que pasaron hoy, la verdad es que no abonan nada a la tranquilidad”, sentenció Nava Astudillo.
Por otra parte, el PRI condenó “enérgicamente” otro ataque registrado la noche del viernes en el municipio de Matlapa, en el estado central de San Luis Potosí, y que dejó tres heridos.
Según medios locales, las víctimas colaboraban en la campaña del candidato del PRI a la alcaldía de Matlapa, César Torres, y fueron atacados en la calle por sujetos que se desplazaban en dos camionetas.
En un comunicado, el presidente del Comité Directivo del PRI en San Luis Potosí, Martín Juárez Córdova, pidió a las autoridades “coordinación e investigación para dar con los responsables” del ataque.
Dijo que las instituciones deben “generar los esquemas de coordinación necesarias que garanticen la tranquilidad para los ciudadanos” de cara a la jornada electoral que se celebrará mañana.