En medio de consignas y amenazas de no incorporarse a las clases el próximo año escolar, cientos de profesores protestaron ayer frente al Ministerio de Educación para exigir que la Comisión que coordina el proceso de reforma de la Ley 66-97 integre al sindicato que les representa.
El presidente de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), Eduardo Hidalgo, advirtió a los educadores de los diez municipios que acudieron a la convocatoria del gremio, que con “la contrarreforma” se intenta recortar algunos beneficios contemplados en la actual legislación, como son el seguro médico, y el sistema especial de jubilaciones y pensiones previstos en el Instituto de Bienestar Magisterial (Inabima).
Advirtió a las autoridades que si en la próxima reunión de la Comisión del Consejo Económico y Social (CES) se aprueba una metodología que excluya a los maestros, se encadenarán frente al Ministerio y harán escuchar la voz de las 155 seccionales en el Palacio Nacional.
En ese sentido, anunció que en la próxima semana continuarán las movilizaciones y no descarta una huelga nacional, ya que están frente a un ministro de Educación, “ciego, sordo y mudo”.
Hidalgo aprovechó el escenario para denunciar que la construcción de más de cien escuelas está paralizada y que las transferencias de fondos a los centros educativos solo se realizaron una sola vez el año escolar pasado.
Agregó que en violación a la carrera docente, el Ministerio está contratando profesores en Baní, Azua, Los Hidalgos y Ocoa, que reprobaron en los concursos de oposición y no están en el banco de elegibles.