La sociedad brasileña esta indignada por el incendio pavoroso del Museo Nacional en Río de Janeiro. Una acto masivo se desarrollaba por la noche en el centro histórico carioca, frente a la intendencia. Miles de brasileños se daban cita para manifestarse contra lo que sintieron como un “robo” a su historia. Lo que resta de las grandes colecciones y de los hechos históricos que albergaba ese palacio de principios del siglo XIX, son apenas unas columnas y paredes que podrían dar por tierra, en una réplica del desastre. La vicedirectora del afamado edificio, que ocupa con su parque más de dos manzanas, dijo que apenas se salvó un 10% de las más de 20 millones de piezas que acumulaba.
Según Cristiana Serejo, que ofreció una conferencia de prensa por la tarde de este lunes, indicó el estado de abandono en el que se encontraban las instalaciones. “No funcionó la alarma contra incendios” confirmó. También declaró que la institución había recibido apenas unos 60.000 dólares a lo largo del año para mantener semejante estructura. Un relato de la Cámara de Diputados de Brasil reveló la caída del presupuesto girado para el museo: en 2011 había recibido 371.000 dólares, una partida que se mantuvo hasta el final de la gestión de Dilma Rousseff en la presidencia del país. Ya con el actual jefe de Estado Michel Temer comenzó el recorte. El año pasado se había restringido a menos de 200.000 dólares y este año batió todos los record al bajar apenas a 60.000 en el período enero-agosto.
Ahora, el Gobierno de Brasil anunció que liberará 10 millones de reales (unos 2,4 millones de dólares) para iniciar las obras de reconstrucción del Museo consumido en la noche del domingo por las llamas.
El ministro de Educación, Rossieli Soares, dijo en una rueda de prensa que los 10 millones de reales serán liberados de un fondo de emergencias para mantener el patrimonio del museo. “La liberación de esos primeros 10 millones de reales será inmediata, para garantizar la estructura física y la seguridad, incluso estructural” del Museo, afirmó Soares.
En declaraciones a la prensa, tras reunión que sostuvo con el director de la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), Roberto Leher; el ministro de Cultura, Sergio Sá Leitao; y representantes de la Policía Federal y otras entidades del Gobierno, Soares afirmó que también se destinarán 5 millones de reales más (unos 1,2 millones de dólares) para financiar un proyecto ejecutivo de reconstrucción que aún no está definido, pero que tendrá el apoyo de la Unesco. El jefe de la cartera de Educación precisó que también va a pedir ayuda internacional para montar un nuevo acervo para el Museo.
A pesar de ser uno de los museos más importantes del mundo y el principal de América Latina, la institución, que era administrada por la UFRJ, desde hacía varios años luchaba por conseguir reancieros que necesitaba la institución. El ministro de Educación, sin embargo, dijo que no hay cómo establecer una relación entre el incendio que alcanzó al Museo Nacional y la reducción de gastos que, por la crisis económica que sufrió Brasil entre 2015 y 2016, viene realizando el Gobierno del presidente Michel Temer para recuperar el déficit fiscal.
Por su parte, el rector de la UFRJ recordó que, como la universidad no contaba con recursos suficientes para la manutención del Museo, ya había firmado con el estatal Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) un contrato para realizar las reformas que necesitaba esa entidad cultural.