SAO PAULO.- El deseo de cambio de los brasileños y el fuerte rechazo al izquierdista Partido de los Trabajadores (PT) han aupado a la Presidencia al ultraderechista Jair Bolsonaro, un firme defensor de los valores tradicionales que se ha valido de las redes sociales para conquistar su victoria.
Con un lenguaje directo y simple, una agenda centrada en la seguridad pública y un discurso repleto de críticas al PT, el capitán de la reserva del Ejército ha pasado en cuestión de meses de ser un diputado de “bajo clero”, conocido por sus declaraciones incendiarias, a vencer las elecciones más turbulentas de Brasil.
A pesar de sus casi 30 años como legislador, Bolsonaro ha capitalizado el descontento de los brasileños con la clase política y especialmente con el PT después de 13 años de Gobierno de izquierdas, los últimos de ellos marcados por un grave escándalo de corrupción y una crisis económica sin precedentes.