Santo Domingo-Es usual que la playa de Boca Chica se vea abarrotada de bañistas de diferentes nacionalidades durante el asueto de Semana Santa y este Viernes Santo no fue la excepción.
Sin embargo, la comunidad haitiana o dependientes de los haitianos, resaltaba entre todos los demás. Eran grupos grandes que habían acudido a esta playa para disfrutar de la brisa, las olas, jugar fútbol en la arena o simplemente distraerse bailando a ritmo de movida música en creole.
De acuerdo con lo que algunos dijeron a Diario Libre, la mayoría son residentes en lugares del Gran Santo Domingo, entre los que citaron Los Alcarrizos, Los Mina, el barrio La Ureña, Villa Mella y otros más. No fueron juntos, pero coincidieron varios grupos que llegaron de visita al lugar, según expresaron.
Por lo que se veía allí, además de los dominicanos y haitianos, había un alto número de venezolanos. La mayoría de los visitantes olvidaron las controversias entre países y las crisis en la nación sudamericana para simplemente disfrutar en armonía de lo cristalino de las aguas y la brisa fresca de Boca Chica.
Otras playas del Este del país como la de Juan Dolio y Guayacanes, también estuvieron muy concurridas este Viernes Santos. Se pudo observar un importante flujo de personas durante la mañana y parte de la tarde, aunque a juzgar por algunos comerciantes y personal de la Defensa Civil, la percepción es de que en años anteriores, el Jueves y Viernes Santo las playas estuvieron más llenas.
Mientras los vacacionistas se tomaban un baño en estas playas, había varios grupos de personas vigilando para garantizar su seguridad; son los miembros de la Defensa Civil, la Cruz Roja y agentes de la Policía Nacional, cuya presencia en Bocha Chica, Juan Dolio, y Guayacanes ha sido bastante notoria.
La labor de estas personas en las playas no es nada fácil. Según aseguran a Diario Libre los agentes de la Defensa Civil, mientras están realizando su trabajo han recibido insultos de algunos ciudadanos, cuando se les llama a la atención para que no se alejen mucho de la orilla por motivos de seguridad.
También tienen que lidiar con personas borrachas que, a las 6:00 de la tarde, cuando deben sacar a los bañistas del agua se resisten a obedecer. Ellos han pedido a la gente que sea más prudente, debido a que la tarea que realizan es de manera voluntaria.