LA HABANA.- La Unión Europea (UE) sumará 4 millones de euros adicionales al monto de su cooperación con Cuba, destinados a la modernización económica y el impulso a la inversión extranjera en el país, anunció este viernes el comisario de Cooperación Internacional y Desarrollo del bloque, Neven Mimica.
Mimica, de visita oficial en La Habana, declaró a la prensa que la nueva cantidad contribuirá a la creación de una ventanilla única que facilite los todavía engorrosos trámites para inversores, una de las principales trabas para la concreción de negocios foráneos en la isla.
“Deseamos seguir apoyando el compromiso de Cuba para mejorar el entorno de la inversión con el fin de alentar a los agentes económicos y financieros de la Unión Europea a explorar iniciativas conjuntas en los principales sectores de desarrollos prioritarios de Cuba”, señaló.
Precisó que tras la entrada en vigor provisional del acuerdo entre el bloque comunitario y Cuba en noviembre de 2017, la cooperación bilateral ha aumentado a más de 100 millones de euros durante este año y se ha impulsado el diálogo bilateral, sobre todo en sectores como la agricultura, las energías renovables y el cambio climático.
Mimica, que participa en un foro de negocios organizado por la Cámara cubana de Comercio con el auspicio de la UE y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), reiteró la condena del bloque europeo a la activación del título III de la Ley Helms-Burton de EE.UU.
La medida permite llevar ante cortes estadounidenses las demandas por terrenos y propiedades confiscadas en Cuba después de 1959 y se une a nuevas disposiciones impuestas por Washington que prohíben la entrada de cruceros estadounidenses, disposiciones que la UE considera “extraterritoriales” y “unilaterales”.
“Estamos muy preocupados por el impacto negativo del endurecimiento del embargo de Estados Unidos y de las recientes restricciones de los viajes a la economía cubana y las condiciones de vida de los cubanos”, destacó Mimica, que se entrevistará con autoridades de la isla durante su estancia.
La apertura a la inversión extranjera se incluye entre las reformas impulsadas por el expresidente Raúl Castro para reflotar la maltrecha economía de la isla, empeñada ahora en alejar el fantasma de la intensa crisis de los años 90 que resurge ante las nuevas presiones de EE.UU. y el empeoramiento de la situación en su aliado Venezuela.
En el foro de negocios celebrado este viernes participan unos 120 hombres de negocios de España, EE.UU. y Canadá, y forma parte de los esfuerzos de la isla por tranquilizar a la comunidad empresarial, captar nuevas inversiones y ofrecer información ante el nuevo escenario.
Autoridades cubanas se reunieron en La Habana con inversores británicos esta semana, cuando se celebró también la feria Expocaribe 2019, considerada la segunda bolsa de negocios más importante del año en la isla, con sede en la oriental Santiago de Cuba.
El ministro cubano de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, insistió en que la isla ofrece todas las garantías previstas en su legislación para las compañías extranjeras aunque reconoció la “existencia de insatisfacciones por dificultades y demoras” en los procesos de aprobación.
También subrayó que las normas cubanas “no discriminan a ningún empresario por el origen de su capital” en alusión a las críticas sobre el supuesto veto del Gobierno a que los cubanos emigrados inviertan en Cuba.
“Abrimos las puertas a los interesados para brindarles el mismo apoyo que reciben el resto de los inversionistas extranjeros”, aseguró este viernes.
En los últimos dos años Cuba ha aprobado negocios con compromisos de inversión por más de 4.500 millones de dólares, a lo que se unen 1.300 millones de dólares más aprobados en lo que va de 2019.
En 2018 se concretaron 38 nuevos contratos, nueve de ellos en la Zona Especial de Desarrollo Mariel, el proyecto estrella del Gobierno cubano para captar capital foráneo, y se encuentran activos actualmente 200 negocios de inversión en varios sectores.
Malmierca adelantó que a pesar de la “persecución financiera estadounidense” las perspectivas de acuerdo para otras negociaciones en curso son “promisorias”.