SEATTLE.- La presencia histórica del abridor venezolano Félix Hernández llegó a su final con los Marineros de Seattle después de completar la última salida al montículo en el partido que el equipo local perdió por 3-1 ante los Atléticos de Oakland, que dieron otro paso más para estar en los ‘playoffs’.
Hernández, que batió todas las marcas como lanzador con los Marineros y en un serio candidato al Salón de la Fama, le tocó vivir el momento de decir adiós a Seattle y a todo lo compartido en sus 15 temporadas en la franquicia.
Como resultado fue el recibir un mensaje de su actual manejador nada más acercarse a él para quitarle la pelota que había lanzado por última vez desde el montículo del T-Mobile Park ante 20.921 espectadores que acudieron a presenciar el partido y se entregaron por completo al derecho venezolano.
“Siempre serás el rey en esta ciudad”, le dijo el piloto de los Marineros, Scott Servais, a Hernández, apodado “King Félix”, mientras tomaba la pelota.
Con lágrimas en los ojos, un emocionado Hernández abandonó el montículo como jugador de los Marineros probablemente por última vez en su carrera.
En el otro lado, los Atléticos dieron un paso más hacia el comodín de la Liga Americana con otra exhibición de excelente combinación de pitcheo, defensa y bateo oportuno.
La última apertura de Hernández en el T-Mobile Park, finaliza esta temporada su contrato con los Marineros, su único equipo en las Grandes Ligas, fue una despedida y una muestra de agradecimiento ya que ambas partes parecen dispuestas a separar sus caminos.
En su última noche, Hernández no fue el “King Félix” de sus años de esplendor sino un pitcher de 33 años en busca de otra salida mágica con la que emocionar a los miles de aficionados que acudieron a su despedida.
“Yo no quería conceder cinco carreras en cinco entradas. Quería salir ahí fuera, hacer mi trabajo y darle al equipo una oportunidad de ganar. Fue una noche divertida”, manifestó el pitcher.
Pero desafortunadamente para Hernández (1-8), quien cargó con la derrota tras conceder tres llegadas al plato y cinco imparables, los Atléticos se jugaban mucho y no estaban dispuestos a participar en los festejos.
Oakland puede asegurarse uno de los dos boletos de comodín de la Americana con una victoria o una derrota de Cleveland este viernes después que los Indios perdieron de manera sorpresiva ante los Medias Blancas de Chicago (0-8).
El primera base Matt Olson disparó un sencillo remolcador en la entrada inicial y el antesalista Matt Chapman aportó un cuadrangular de dos carreras en la segunda.
El abridor Sean Manaea (4-1) concedió una carrera y cuatro imparables en seis episodios para la victoria y el cerrador Liam Hendriks lanzó una novena perfecta para su vigésimo quinto rescate de la temporada.