SAO PAULO.- La Policía brasileña inició este viernes una nueva fase (la 66) de la operación anticorrupción conocida como Lava Jato contra el supuesto blanqueo de capitales en el Banco do Brasil, la mayor entidad financiera estatal del país.
Agentes de la Policía Federal cumplen siete órdenes de registro en domicilios de las ciudades de Sao Paulo y Natal para investigar delitos de lavado de dinero practicados por cambistas y funcionarios del Banco do Brasil, según informó la institución en un comunicado.
Las pesquisas indican que los investigados habrían actuado “en beneficio de empresas” que eran contratadas por la petrolera estatal Petrobras y “necesitaban dinero en efectivo para el pago” de sobornos a “agentes públicos”.
La Policía asegura tener documentos que prueban que un solo cambista, no identificado, “habría sido el responsable de generar al menos 110 millones de reales (unos 26,5 millones de dólares) en efectivo para hacer viable el pago de coimas”.
De acuerdo con la Fiscalía, entre los investigados hay tres gerentes y un exgerente del Banco do Brasil que facilitaron esas operaciones de blanqueo de capitales, que se estima que superaron los 200 millones de reales (48 millones de dólares) entre 2011 y 2014.
La red corrupta, sostiene la Policía, obtenía el dinero en efectivo a partir del intercambio de cheques obtenidos en comercios de Sao Paulo y la apertura de cuentas bancarias sin la documentación necesaria y con firmas falsas en nombre de empresas del sector inmobiliario.
Asimismo, las autoridades sospechan que los gerentes de las agencias bancarias investigados daban apoyo a la trama posibilitando el cobro de los cheques y justificando internamente tales acciones para evitar una investigación interna por parte del Banco do Brasil.
A cambio, recibían comisiones ilegales y conseguían vender los productos del banco para alcanzar sus metas, según la Policía Federal.
La operación Lava Jato, que ayudó a destapar otras tramas corruptas en varios países de Latinoamérica, investiga desde hace cinco años el millonario desvío de fondos en el seno de Petrobras y ha llevado a prisión a decenas de empresarios y políticos, entre ellos al expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva.
Sin embargo, la Corte Suprema abrió el jueves las puertas a anular muchos de los juicios realizados a partir de las investigaciones de la Lava Jato, en una polémica decisión que puede incidir, según la Fiscalía, en los casos de 143 de los 162 empresarios y políticos condenados en el marco de esta operación.