DALLAS, EE.UU.- El ala-pívot canadiense Dwight Powell, que estableció varias marcas individuales, surgió como la figura del ataque balanceado de los Mavericks de Dallas que esta noche se impusieron por 121-114 a los Timberwolves de Minnesota y lograron la cuarta victoria consecutiva.
La inspiración encestadora de Powell, que estuvo perfecto en los tiros de campo (9-9) y acabó con 24 puntos, incluidos 11 en el primer cuarto (5-5) -mejor marca profesional-, también fue decisivo en el tercer periodo cuando los Timberwolves se pusieron con ventaja de 11 tantos y él se encargó de iniciar la remontada.
Sin embargo, una lesión que se produjo en el brazo izquierdo le obligó a abandonar el campo en la recta final el cuarto periodo, pero para entonces ya había realizado su gran aportación al equipo de cara a que pudiese conseguir la victoria.
Powell (9-9, 2-2, 4-5) también aportó cinco rebotes, cuatro asistencias, dos tapones y recuperó un balón en los 25 minutos que vio acción.
Un choque fortuito con su compatriota el alero Andrew Wiggins fue lo que le forzó a abandonar el campo cuando estaba jugando su mejor baloncesto y partido desde que comenzó la temporada.
El equipo de los Mavericks todavía no ha dado a conocer el alcance real de la lesión de Powell, pero podría estar en peligro su participación con el equipo el próximo sábado cuando se enfrenten a los Pelicans de Nueva Orleans.
Tras la salida de Powell del partido, su relevo de jugador sorpresa y ganador lo tomó el base reserva Jalen Brunson, quien también tuvo su mejor toque de muñeca y a falta de 9:36 minutos por jugarse del tiempo reglamentario anotó la canasta con la que los Mavericks pusieron el empate a 86 en el marcador.
Momentos después llegaría un triple del ala-pívot alemán Maxi Kleber tras recibir la asistencia del base reserva Delon Wright que daba la ventaja a los Mavericks 89-86, mientras que el jugador estrella del equipo de Dallas, Luka Doncic estaba sentado en el banquillo.
Los Mavericks, acostumbrados a las genialidades de Doncic en los momentos decisivos que les ha permitido ganar partidos, esta vez no necesitaron de sus acciones heroicas y supieron mostrarse como equipo ganador, que tiene marca de 15-6, líderes de la División Suroeste.
Brunson, que acabó con 16 puntos -14 en el cuarto periodo-, cuatro rebotes y tres asistencias, surgió como el factor sorpresa ganador de los Mavericks al igual que Kleber que llegó a los 12 tantos y capturó siete balones bajo los aros, además de repartir dos asistencias.
“Hemos encontrado las maneras de ser cada día mejores como equipo y eso nos ha convertido en un grupo muy especial”, comentó Brunson, que surgió con su mejor inspiración encestadora cuando el partido estaba más igualado y permitió a los Mavericks conseguir el noveno triunfo en los últimos 10 partidos disputados.
Otro reserva, el alero Justin Jackson anotó otro triple decisivo que permitió a los Mavericks a falta de 6:37 minutos ponerse con ventaja de cuatro tantos en el marcador y no cederla el resto del camino.
Del resto se encargó Doncic, quien volvió al campo para disputar los últimos cinco minutos y anotó su primer triple del partido, que dio a los Mavericks la ventaja parcial de cinco tantos, y con otros tres tiros de personal la incrementó hasta los ocho.
El ala-pívot letón Kristaps Porzingis también logró un triple que rompió el intento de remontada de los Timberwolves y con menos de tres minutos por jugarse le dio a lo Mavericks la ventaja de 10 tantos ya la decisiva, además de hacer otro mate que compensó las dos canastas logradas por los Timberwolves.
Doncic acabó el partido con 22 puntos (8-22, 1-8, 5-8), siete rebotes -defensivos-, seis asistencias, perdió cinco balones y cometió dos faltas personales en 32 minutos que estuvo en la pista del American Airlines Center.
Mientras que Porzingis jugó 29 minutos y logró 19 puntos (7-15, 2-6, 3-4), capturó seis rebotes, y puso un tapón.
Los Timberwolves (10-10) volvieron a tener problemas con la defensa en la recta final del partido y los 26 puntos que aportó cada uno, Wiggins y el pívot estadounidense de origen dominicano Karl-Anthony Towns, no fueron suficientes a la hora de evitar la derrota.
Junto a Towns, que capturó nueve rebotes y repartió siete asistencias, el ala-pívot Robert Covington también anotó 22 puntos, y recuperó seis balones bajo los aros.
El escolta Jarrett Culver con 11 puntos completó la lista de los cuatro jugadores de los Timberwolves que acabaron el partido con números de dos dígitos, pero tampoco fueron suficientes a la hora de evitar la segunda derrota consecutiva del equipo de Minnesota.