MOSCÚ.- Una victoria en la tercera partida del desempate permitió a la china Ju Wenjun retener su título mundial femenino de ajedrez frente a la aspirante rusa Aleksandra Goryachkina en el encuentro cuya primera mitad se disputó en Shanghái y la segunda en Vladivostok.
Las doce partidas a ritmo clásico del Mundial (por primera vez con un formato similar al masculino) habían terminado con empate a seis puntos. Cada jugadora había ganado tres juegos y los seis restantes acabaron en tablas.
Goryachkina había forzado el desempate al ganar la dramática duodécima partida pero en las rápidas careció de inspiración para convertir en victorias sus posiciones favorables y en la tercera sufrió la derrota decisiva.
El desempate empezaba con cuatro partidas rápidas (25 minutos para cada jugadora, más 10 segundos de incremento por movimiento). El ránking de esta modalidad daba favorita a la china (segunda tras su compatriota Hou Yifan), frente a la rusa (décima).
En el primer juego Goryachkina dejó escapar, con negras, una posición ganadora. Su ventaja era enorme después de 40 movimientos pero el cambio de damas y la liquidación de material alivió la situación de la campeona, que llevó su único peón a séptima en la columna d y coronó a cambio del alfil negro, una compensación suficiente frente a los tres infantes negros unidos en el flanco de rey. Se firmó el empate por repetición de jugadas en la 67.
La aspirante tampoco aprovechó la iniciativa con blancas en la segunda partida. Su peón de ventaja en el final fue insuficiente para obtener el punto. Frustrada por las dos oportunidades perdidas, Goryachkina llegó a realizar un movimiento (72.Re4) cuando los dos monarcas ya estaba solos en el tablero.
La aspirante competía en casa con la pesada carga de no defraudar las esperanzas de Rusia, una gran potencia histórica del ajedrez, que no tiene una campeona mundial desde Alexandra Kosteniuk, que lo fue entre 2008 y 2010, y un campeón desde Vladimir Kramnik, que retuvo el título durante siete años, hasta perder con el indio Wiswanathan Anand en 2007.
Ju Wenjun, resignada a pelear contra las cuerdas en las dos primeras rápidas, reaccionó en la tercera. Con el ataque indio de la apertura Reti fue construyendo una posición dominante que, a partir de la jugada 30, ya era abrumadora. Sus dos peones libres y unidos obligaron a rendirse a la aspirante después de 45 movimientos.
La sombra de la derrota en el desempate de un Mundial pesaba sobre Goryachkina. Ya les había ocurrido a dos compatriotas suyos: a Sergey Karjakin frente a Magnus Carlsen en 2016 y a Kateryna Lagno contra la china Tan Zhongyi en 2018.
Como en la duodécima y última partida de la serie regular del “match”, Goryachkina tenía que jugarse el todo por el todo en la última del primer desempate. Sólo la victoria alargaba la contienda a un segundo desempate a partidas relámpago, pero la rusa abrigaba la esperanza de repetir el resultado de la duodécima, cuando derrotó a la campeona y forzó el desempate.
La rusa abrió con una inglesa 1.c4 y sacrificó un peón central para abrir la posición y mejorar la actividad de sus piezas, pero no encontró la fórmula para batir el bastión enemigo. Las negras se defendieron con precisión y en 20 movimientos habían dado la vuelta al panorama, en un final de dama, torres y alfil de casillas blancas con peón de más.
Al final fue Goryachkina la que tuvo que batirse para evitar una nueva derrota y terminar, al menos, el encuentro con un resultado muy digno para una jugadora de 21 años, seis más joven que la campeona.
De la bolsa total de medio millón de euros, la más alta de la historia en ajedrez femenino, Ju Wenjun se embolsa 275.000 y Goryachkina 225.000.