Jesús Pascual Cabrera Ruiz, líder de la red de sicariato y narcotráfico desmantelada el pasado sábado, encomendó a Juan Ángel Peña Teveras (El Gordo) gestionar con los jueces que llevaban el caso de Winston Rizik (El Gallero) para que estos lo condenaran a la pena máxima.
Sin embargo, los nombrados Juan Miguel Silvestre de León y otro identificado solo como “Turbí”, señalados como miembros de la organización, se quejaban de que Rizik fue sentenciado a 10 años de cárcel y ya con casi cinco años cumplidos puede solicitar su libertad condicional.
Según establece el Código Procesal Penal, una persona condenada puede solicitar dicha acción tras cumplir la mitad de su condena, cumpliendo algunos requisitos necesarios para interponerla.
De acuerdo a las transcripciones de las conversaciones vía telefónica interceptadas por las autoridades, contenidas en la solicitud de medida de coerción contra algunos miembros de la red.
“Le cantaron lo mismo diez años y ya él tiene casi cinco, la mitad de la pena, ya sale de ahí”, dijo Silvestre de León.
“Sale si, casi él va para fuera y el hermano está afuera, ese si es peligroso”, manifestó Turbí.
Condena
El 19 de julio, el Primer Tribunal Colegiado de Santo Domingo condenó a 10 años de prisión a Rizik (El Gallero), acusado de incurrir en actividades de narcotráfico, lavado de activos y porte ilegal de armas de fuego.
En tanto que contra su hermano Nelson Rizik Delgado, quien fue acusado de ser testaferro y ocultar propiedades, le fue dictado 5 años de prisión suspendida, bajo la modalidad de visitas ante el juez de ejecución de la pena a firmar el libro de registro.
El tribunal confirmó la sentencia que había dictado en contra de los hermanos Rizik el Tribunal Colegiado de Monte Plata en el mes de mayo de 2016, la cual había sido anulada por la Cámara Penal de la Corte de Apelación del Departamento Judicial de Santo Domingo, quien ordenó un nuevo juicio.
Por la anulación de la sentencia, tres jueces de dicha corte fueron suspendidos.
Doble identidad
El expediente establece que Peña Teveras (El Gordo), acusado de ser el brazo operativo del grupo de sicarios al servicio de Cabrera Ruiz, se creó una nueva identidad falsificando una cédula emitida por la Junta Central Electoral (JCE) con el número 001-0006480-9 a nombre de Francisco Gómez Montero, pero con su foto.
Con dichos elementos, la Procuraduría Antilavado comprobará que los miembros de dicha organización se dedicaban a la actividad de narcotráfico y lavado de activos, así también de ser los responsables del asesinato de Randy Mario Manzanillo, vinculado a Rizik (El Gallero), según las pruebas obtenidas tras la mapificación de los teléfonos celulares de los implicados.
Entre las pruebas recolectadas durante los allanamientos en las residencias y negocios de los imputados, figuran varios recibos de entidades bancarias con los cuales se comprobará que estos realizaron depósitos y transferencias de altas sumas de dinero en pesos y dólares a las cuenta de Peña Taveras (El Gordo) y su pareja Miladys Cristal García Rodríguez, así como a la cuenta de la compañía Rodtaver Inversiones, S.R.L por un total de RD$2.000.000.00, depositados dos días antes del asesinato de Manzanillo.
Además se ocuparon varios tipos de armas de fuego como ametralladoras, escopetas, pistolas, pasaportes, dos relojes marca rolex y RD$888,500 en efectivo.
Entre los miembros de la red figura José Augusto Then Rosario, quien ejecutó el atentado contra el capo Winston Rizik en la cárcel El Pinito de La Vega el 20 de diciembre del año pasado. Asimismo, fue señalado David Enmanuel Silvestre Sierra (Chuplú), quien tras ser detenido admitió a los investigadores de la Policía haber participado en los asesinatos de César Alexander Sánchez Ortiz, de 43 años, en noviembre de 2017, y del agente de la DNCD José Bienvenido Marte Mercedes, en abril pasado.
El lunes, el juez del Juzgado de la Instrucción de La Romana, Nehemías Ramírez, ratificó la prisión preventiva de ocho meses al imputado Jesús Pascual Cabrera Ruiz, acusado de liderar la supuesta red de narcotráfico y lavado.
