Donald Trump, ordenó este lunes la imposición de aranceles del 10% por valor de 200.000 millones de dólares a productos chinos a partir del próximo 24 de septiembre.
En un comunicado difundido por la Casa Blanca, el mandatario agregó que esos gravámenes aumentarán al 25% a partir del 1° de enero. Además, Trump amenazó con aranceles adicionales si China adopta represalias sobre nuestros agricultores y nuestras industrias, pondremos inmediatamente en marcha la fase tres, que implica sanciones adicionales sobre otros 267.000 millones de dólares en importaciones”, advirtió la Casa Blanca.
Es ya una guerra comercial y un clima de tensiones comerciales con la segunda economía del mundo, Trump “no está satisfecho con las discusiones con China. Mi impresión es que los anuncios podrían venir pronto”, había dicho el asesor económico de la Casa Blanca Larry Kudlow a la cadena CNBC.
Beijing ya avisó que impondría represalias, si Trump concretaba este plan, que significaría que cerca de la mitad de las importaciones de Estados Unidos con China quedarían bajo aranceles.
El banco central estadounidense dijo la semana pasada que la guerra comercial lanzada por Trump está presionando a las empresas estadounidenses y las están haciendo demorar o recortar sus planes de inversiones.