MÉXICO.- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este lunes que su política de diálogo con Estados Unidos tras el anuncio de los aranceles forma parte de una “estrategia” para dar “confianza y certidumbre”, y dijo que se logrará un acuerdo.
“Tenemos nosotros una estrategia para que haya confianza y certidumbre, para que no haya miedo”, apuntó el líder de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) desde Palacio Nacional.
López Obrador hizo esta reflexión cuestionado sobre el futuro de los mexicanos que viven en Estados Unidos si se recrudece la relación entre ambos países.
En este sentido, dijo a los ciudadanos mexicanos que viven en Estados Unidos, pero también a empresarios e inversionistas, que cuentan con el “apoyo del Gobierno de México”.
“Sentimos que vamos a llegar a un acuerdo”, aseveró y posteriormente insistió en la idea de que “pase lo que pase, en México va a haber progreso”.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el jueves pasado su decisión de aplicar aranceles incrementales de 5 a 25 % a partir del 10 de junio si México no frena la creciente migración hacia su vecino del norte, una medida que tendría graves consecuencias para la nación latinoamericana.
López Obrador respondió apelando al diálogo y dijo que no caerá en la provocación. Es por ello que ya se encuentra en Estados Unidos una delegación encabezada por el canciller mexicano, Marcelo Ebrard.
Pese a que Trump ha pedido acción y no palabras, hasta el momento el jefe de Gobierno mexicano ha enviado una carta a su homólogo estadounidense y luego un memorándum de amistad a Estados Unidos.
Este lunes, reiteró que su Gobierno “humanista” tiene como misión defender a los migrantes que se desplazan por faltas de oportunidades de trabajo o por la violencia.
“No vamos a engancharnos en una confrontación y nosotros pensamos que se puede llegar a un acuerdo con el Gobierno de Estados Unidos. (…) Queremos seguir siendo amigos del presidente Donald Trump”, subrayó.
Finalmente, recordó que en Estados Unidos importantes agentes económicos como cámaras de comercio y los estados fronterizos ya han criticado la última medida de Trump.
Sobre su comunicación con los países de Centroamérica, expuso que hay “una relación permanente entre los diplomáticos de México y países centroamericanos”.
A juicio del presidente mexicano, el problema de esta región es la pobreza.
Por ello es que se quiere aplicar un Plan de Desarrollo para México y Centroamérica que genere empleos y bienestar en las naciones.
“Que los países de nuestros hermanos centroamericanos tengan alternativas, tengan opción y no se vean obligados a echarse a andar y a correr riesgos, muchos riesgos para buscar algo que mitigue su hambre y su pobreza, que es el fondo del problema”, concluyó.