MOSCÚ.- Rusia acusó a Estados Unidos de poner en peligro el actual sistema mundial de control de armamento, después de que ambos países abandonaran hoy el tratado de eliminación de misiles de corto y medio alcance (INF) suscrito en 1987.
“La denuncia del INF confirma que EEUU ha tomado el rumbo de destrucción de todos los acuerdos internacionales que, por uno u otro motivo, ya no le convienen. Esto conducirá prácticamente al desmontaje del actual sistema de control de armamento”, informó la Cancillería rusa en un comunicado.
Moscú acusó a Washington de orquestar una campaña de propaganda para acusarle de violar el tratado a ojos de la comunidad internacional, lo que hizo imposible salvar el INF, táctica que Estados Unidos ya aplicó para renunciar en 2002 al tratado de defensa antimisiles.
“El motivo es conocido: en EEUU querían librarse de las limitaciones que le imponía”, señaló.
Estados Unidos abandonó el tratado ante la negativa de Moscú de destruir el misil de crucero ruso Novator 9M729 (SSC-8, según la clasificación de la OTAN), que violaría el pacto, de acuerdo con Washington.
Mientras, la Cancillería insistió hoy en el argumento reiterado en varias ocasiones por el presidente ruso, Vladímir Putin, de que EEUU violó “de manera flagrante” el INF desde el momento en que desplegó en Rumanía y Polonia lanzaderas verticales MK-41 que sirven para los misiles de crucero Tomahawk.
La nota acusó hoy también a Estados Unidos de hipocresía al afirmar que el INF estaba “obsoleto” y que hay que “atraer a terceros países”, en clara alusión a China.
“Cuando no se puede obviar que esos países no están preparados para asumir las responsabilidades que contempla el acuerdo”, agregó.
El secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, anunció hoy la retirada oficial de EEUU del acuerdo, responsabilizó exclusivamente a Rusia de “la muerte del tratado” e invitó a China a formar parte de “una nueva era del control de armas”.
Seguidamente, la Cancillería rusa comunicó que el INF había dejado de existir este viernes “por iniciativa” de Estados Unidos.
“Con este paso, Estados Unidos hará que la política mundial sea impredecible y caótica”, dijo esta semana el último dirigente soviético, Mijaíl Gorbachov, quien firmó el tratado con el entonces presidente de EEUU, Ronald Reagan, el 8 de diciembre de 1987.