BARCELONA.- Los partidos independentistas catalanes pactaron este martes seguir defendiendo en el Parlamento regional derecho de autodeterminación, pese a las advertencias del Tribunal Constitucional (TC) español sobre las consecuencias que podría tener un nuevo ataque a la legalidad.
Una semana después de que el Tribunal Supremo español hiciera pública la sentencia que condenaba por secesión los líderes secesionistas que participaron en la declaración de independencia de octubre de 2017, los tres partidos reiteraron su rechazo por las condenas e insistieron en que el reconocimiento de la autodeterminación de Cataluña es la única solución.
Este compromiso fue plasmado en una resolución por las formaciones JxCat (coalición encabezada por el expresidente autonómico Carles Puigdemont, fugadode la Justicia a Bélgica), ERC (republicanos separatistas de izquierda) y la CUP (independentistas radicales).
La resolución, aunque roza la desobediencia a las órdenes del TC, está sin embargo redactada en términos que evitan incurrir en ese delito.
El presidente regional catalán, Qim Torra, celebró en una rueda de prensa el acuerdo pactado entre las tres formaciones nacionalistas, que pone un paño de agua fría a la tensa situación entre ellos, sobre todo a raíz de las violentas protestas callejeras que produjeron la pasada semana en Cataluña.
“Nadie prohibirá nunca que este país continúe avanzando en la línea de lo que la ciudadanía quiere. Llegaremos tan lejos como la ciudadanía quiera llegar. Estaremos siempre al lado de la defensa del derecho a la autodeterminación, siempre”, dijo Torra.
El ejecutivo autonómico catalán acordó hoy también instar al presidente del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, a “un diálogo sin condiciones” en el que seguirá defendiendo el derecho a la autodeterminación como vía para defender el futuro político de Cataluña.
Un escenario que de momento no contempla Sánchez que, en un acto electoral en la ciudad de Huelva (sur de España), dijo hoy que si Torra quiere hablar “que lo haga primero con los catalanes, sobre todo con los que no piensan como él” y que “si tiene que hacer llamadas, que lo haga a la convivencia”.
“Primero ley y después diálogo”, subrayó Sánchez, quien insistió en que el presidente regional de Cataluña debe hacer “llamadas a la convivencia, al rechazo de la violencia y a la solidaridad con los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado”.