SANTO DOMINGO.- Las autoridades aéreas de República Dominicana informaron este martes sobre la muerte de tres personas que viajaban en una avioneta que se estrelló el lunes en la comunidad Mena de Tamayo, provincia Bahoruco (suroeste del país), y que no había sido detectada hasta el día de este martes.

El Instituto Dominicano de Aviación Civil (IDAC) confirmó mediante un comunicado que la aeronave, que realizaba una “operación ilícita”, resultó calcinada y que hasta esta tarde no había sido posible hacer una identificación positiva de dos de los ocupantes del aparato.

De acuerdo con documentos encontrados, se trata del piloto Arturo Cora, dominicano, y de Miguel Escobar Castillo, venezolano, según precisa un informe de la Dirección de Normas de Vuelo del IDAC, que apunta que “en el lugar del accidente se encontraron evidencias” de que “perecieron tres personas”.

Sobre el primero de ellos, provisto de licencia de piloto comercial, pesaba impedimento de vuelo desde el 18 de enero de 2018, debido a infracciones de la Ley de Aviación Civil y del Reglamento Aeronáutico Dominicano.

Además, se investiga de dónde salió y hacia dónde se dirigía la avioneta, es decir, la ruta volada por la aeronave, dado que “se trata de una operación ilícita”.

En la aviación civil un vuelo se tipifica como ilícito cuando no tiene contacto con las autoridades y no cumple con las normas establecidas en el país.

En el informe enviado a la Dirección General del IDAC se adjuntaron copias “del impedimento de vuelo y del perfil de personal aeronáutico”.

En una comunicación de esta mañana, en la que solo se daba cuenta del siniestro sin aportar detalles, el IDAC explicó que no le había sido notificado ningún vuelo de una aeronave con las especificaciones de la que se accidentó, de modo que carecía datos sobre el percance, del que daban cuenta algunos medios locales.

“Corresponde entonces a los organismos de investigación del Estado ofrecer los detalles, según los resultados de las indagaciones abiertas”, se explicaba en una nota.

Asimismo, informaron que hasta esta mañana no le fue notificado el avistamiento de la aeronave siniestrada y que tan pronto se conoció la noticia los organismos de emergencia y protección civil, así como agencias de seguridad del Estado se apersonaron al lugar del hecho.

En el último año se ha registrado diversos siniestros de pequeños aparatos aéreos en República Dominicana, el último ocurrido en agosto, cuando un piloto francés se precipitó a tierra mientras realizaba labores de fumigación en Los Rieles, en San Francisco de Macorís, provincia Duarte (noreste).

En junio, cuatro personas fallecieron en otro accidente registrado en La Ciénaga, Barahona (suroeste), punto donde se estrelló una aeronave que volaba desde el aeropuerto internacional María Montés, en Barahona, hacia Cabo Rojo, en Pedernales (suroeste).

A principios de año otra avioneta que realizaba un viaje irregular cayó en el municipio San Rafael del Yuma, La Altagracia (este), aunque en ese caso no se detectaron víctimas ya que los ocupantes abandonaron el aparato en el lugar del accidente.