TEHERÁN.- Las congregaciones para el rezo musulmán del mediodía del viernes fueron canceladas en 23 capitales provinciales de Irán, entre ellas Teherán, para intentar frenar el avance del coronavirus en el país, donde ya han muerto 34 personas.
Según las cifras ofrecidas este viernes por el Ministerio de Salud, en las últimas 24 horas se han confirmado 143 nuevos contagios, de los que ocho han fallecido, con lo que el balance global aumenta a 34 muertos de entre 388 infectados.
El mayor número de nuevos casos se registró en la provincia de Teherán, con 64; seguida de la norteña Guilán, con 25, y de Qom, con 16, precisó el portavoz de Salud, Kianush Yahanpur, quien agregó asimismo que un total de 73 personas que estuvieron contagiadas han sido dadas de alta.
La cancelación de los rezos multitudinarios afectó, además de a Teherán, Qom y Rasht (la capital de Guilán), a ciudades como Mashad (noreste), Tabriz (norte), Isfahan (centro), Shiraz (sur) y Ahvaz (oeste).
El rezo público también se ha cancelado en numerosas localidades de las provincias afectadas y solo se ha celebrado en aquellas ciudades en las que no se ha detectado ningún caso de coronavirus.
La enfermedad ya está presente, de acuerdo a los datos de hoy, en 24 de las 31 provincias del país, una rápida expansión desde que se diagnosticaran hace diez días los dos primeros casos en Qom.
“La incidencia de la enfermedad en la mayoría de las provincias parece estar en aumento y ese proceso continuará en los próximos días”, advirtió el portavoz de Salud, quien explicó que la media de edad de los fallecidos de COVID-19 supera los 60 años.
Yahanpur recomendó permanecer en casa y no realizar desplazamientos innecesarios, responsabilizando a aquellos que decidieron viajar al norte del país de haber fomentado el aumento de casos de contagio en provincias como la de Guilán.
La enfermedad COVID-19 se ha propagado también entre las autoridades. Ayer se supo que la vicepresidenta para Asuntos de la Mujer y de la Familia de Irán, Masumeh Ebtekar, está contagiada de coronavirus y en cuarentena.
Entre los contagiados figura también el viceministro de Salud, Iraj Harirchi, y al menos cuatro diputados, entre ellos Moytaba Zolnur, presidente de la Comisión de Seguridad Nacional y Política Exterior del Parlamento, y el reformista Mahmud Sadeqí.
Debido al aumento de los casos, las autoridades iraníes han extendido la suspensión de las clases a toda la próxima semana y de todo tipo de eventos, desde deportivos a culturales y religiosos.
Además, decidieron la víspera prohibir la entrada a los ciudadanos chinos al país, aunque recibieron del Gobierno chino el primer cargamento de ayuda para luchar contra el coronavirus con miles de dispositivos de diagnóstico.
Por su parte, los países vecinos de Irán han cerrado sus fronteras terrestres y la mayoría de las aerolíneas han suspendido sus vuelos o impuesto restricciones, después de que detectaran casos positivos procedentes de la República Islámica.