MÉXICO.- Estados Unidos incumplió con invertir en el sureste mexicano pese al acuerdo de cooperación con México y tras un año del inicio del Plan de Desarrollo Integral para Centroamérica que busca controlar la migración, afirmó este viernes el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“No cumplió el Gobierno estadounidense con el ofrecimiento de que iban a destinar inversión al sur-sureste, pero nosotros sí hemos invertido. La inversión en el sur-sureste ha crecido mucho con ese propósito de crear cortinas de desarrollo de sur a norte para que la gente no se vea obligada a emigrar”, aseveró el mandatario.
Los Gobiernos mexicano y estadounidense acercaron en diciembre de 2018 posiciones con un plan conjunto de cooperación en el sur de México y en Centroamérica, con multimillonarias inversiones y el afán de frenar la migración detonando el progreso, una promesa que no se habría concretado por parte de Estados Unidos.
López Obrador se refirió además al plan que presentó hace un año en el Palacio Nacional con funcionarios de Guatemala, Honduras, El Salvador y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) para el sureste del país y el Triángulo Norte centroamericano.
El plan es una de las acciones que el Gobierno mexicano ha implementado para contener la migración de Centroamérica y el propio México hacia Estados Unidos, una de las principales demandas del presidente Donald Trump, quien incluso amenazó con imponer aranceles si el Ejecutivo de López Obrador no actuaba.
La Secretaría mexicana de Relaciones Exteriores esperaba una inversión de más de 10.000 millones de dólares de Washington para el llamado “Plan Marshall” centroamericano, reveló el canciller Marcelo Ebrard días después del anuncio de la estrategia.
Aunque esto nunca se materializara, López Obrador rechazó este viernes haber tenido conflictos con Estados Unidos al asegurar que “hay una actuación respetuosa del Gobierno del presidente Trump”.
“No hemos padecido ningún acto de prepotencia del Gobierno de Estados Unidos y tampoco lo permitimos”, aseguró.
Como inversiones del Gobierno de México para el sureste del país, López Obrador destacó el Tren Maya, una obra de 120.000 millones de pesos (más de 5.500 millones de dólares) con una extensión de 1.460 kilómetros en cinco estados de la región.
El mandatario afirmó que se crearán 80,000 empleos con los cuatro tramos ya licitados este año, además de 150.000 para el próximo año.
También destacó su programa de reforestación que ha permitido la siembra de 1 millón de hectáreas de caobas, cedros, café y cacao, entre otros árboles frutales y maderables.
De esa cantidad, 600,000 serían en cinco estados del sureste, con un beneficio para 400,000 campesinos.
Este programa se ha ofrecido a los gobiernos centroamericanos para evitar la migración de los campesinos.
“El programa más importante de reforestación en el mundo en la actualidad es el programa Sembrando Vida, en ningún país del mundo se están sembrando 1 millón de hectáreas de árboles frutales y maderables”, manifestó.
La pandemia de COVID-19 ha agravado la situación de los migrantes en México, pues han quedado atrapados en el país, según denuncian organizaciones civiles nacionales y organismos internacionales.
En el país hay cerca de 4,800 personas solicitantes de asilo que viven en 89 albergues, indicó en mayo la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) en México.