El Foro Permanente de Partidos Políticos de la República Dominicana (FOPPPREDOM), dijo que los partidos políticos emergentes o minoritarios se ganaron un lugar en la historia democrática nacional, participando en el proceso electoral de 2020 contra viento y marea.
Según las declaraciones del FOPPPREDOM, los partidos no recibieron dinero del Estado hasta 4 días antes de las elecciones presidenciales y congresuales de julio. Pero a pesar de no tener financiamiento, acudieron al proceso y obtuvieron decenas de representantes, en todos los niveles de elección.
En efecto, sostiene el FOPPPREDOM que fue precisamente por el apoyo y la participación destacadísima de decenas de organizaciones estigmatizadas como “las del cero por ciento” que los partidos PLD y PRM lograron presentarse al electorado como organizaciones exitosas.
En cuanto al PRM, fueron sus aliados minoritarios los que hicieron la diferencia, puesto que ese partido, por sí solo, no llegó al 50% de los votos válidos.
En el caso del PLD, el porcentaje de votos en su boleta fue el más bajo de su historia electoral, alcanzando poco más del 30% de los votos válidos.
Asimismo, advierte el FOPPPREDOM que los partidos pequeños se multiplicaron por decenas de miles de votos, que no solamente hicieron la diferencia sino que también permitieron a muchos candidatos de minorías ganar sus posiciones electivas.
Es el caso de las senadurías de Santiago y San José de Ocoa, ganadas por candidatos originarios de los partidos Dominicanos por el Cambio y Bloque Institucional Socialdemócrata. También es el caso del PRSC, FP, PRM, Frente Amplio, ALPAIS, PQDC, PUN y otros, cuyos candidatos ganaron decenas de diputaciones, alcaldías, direcciones, regidurías y vocalías municipales.
Esos partidos, de acuerdo a lo reportado por el FOPPPREDOM, concurrieron no solamente sin dinero, sino también sin apoyo del Estado, sin posibilidades de realizar propaganda en los medios y enfrentando las limitaciones derivadas de la pandemia de Covid 19, saliendo exitosamente de la campaña electoral más cara de toda la historia democrática dominicana.
En vez de retirarse de los procesos, decenas de partidos lucharon a brazo partido contra las circunstancias, logrando que el sistema democrático dominicano pudiera aglutinar la más variada representación popular que llega al Congreso y a los ayuntamientos en los últimos 20 años.
FOPPPREDOM insiste en que la reconfiguración del sistema de partidos es un asunto de vital importancia para el sistema democrático, tan cruciales y determinantes que su desaparición forzada en aras del bipartidismo podría dar paso a un sistema electoral excluyente, oligárquico y de designación, como si las posiciones públicas fueran hereditarias.
En consecuencia, el FOPPPREDOM sostiene que partidos con representantes en todos los niveles de elección no pueden perder la personería jurídica, lo que sería un sinsentido y un desconocimiento inaceptable, que ni siquiera tiene respaldo legal.
En efecto, el único sistema actualmente vigente para determinar el posicionamiento de los partidos en la boleta es la sumatoria de votos. Varios tribunales ya decidieron que sumar las votaciones de los partidos es el método que debe utilizarse para definir su posicionamiento.
Por tanto, FOPPPREDOM hace un ferviente llamado a la Junta Central Electoral para que sume los dos promedios de votación de las elecciones municipales, de un lado, y presidenciales, senatoriales y de diputados de otro. Con ello, hará justicia a los partidos –que se esforzaron y respaldaron el proceso electoral con todas sus fuerzas– y aplicará la ley, tal como el Tribunal Constitucional, el Tribunal Superior Electoral y el propio Tribunal Superior Electoral han definido en varias sentencias sobre el tema.