La falta de consenso sobre el candidato a presidir el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), un cargo que siempre ha recaído en un latinoamericano y que ahora Estados Unidos quiere ocupar, empujó a líderes y organizaciones de la región y de Europa a pedir un aplazamiento de la votación -prevista para este fin de semana- por falta de garantías en el proceso.

La clave de la disputa está en la propuesta inédita de EE. UU.: la candidatura de Mauricio Claver-Carone, de origen cubano y principal asesor del presidente de estadounidense, Donald Trump, para América Latina.

Frente al hombre de Trump y tras la renuncia de otros aspirantes, el abogado Gustavo Béliz, secretario de Asuntos Estratégicos de Argentina, es el único que dará la batalla este fin de semana en una apretada votación para que la jefatura del BID siga en la región.

Estados Unidos ha rechazado hasta el momento la propuesta de cambiar de fecha la votación sobre quien reemplazará al actual presidente, el colombiano Luis Alberto Moreno, quien desde 2005 está a la cabeza del BID.

Claver-Carone fue oficialmente nominado por Estados Unidos, El Salvador, Guyana, Haití y Paraguay.

Colombia cerró filas en torno a esa candidatura y el presidente Iván Duque defiende que se mantenga la fecha al señalar que la elección de este fin de semana ‘debe realizarse para darle claridad a toda la región en un momento difícil y de incertidumbre, tiene que servir también para que la institución se siga fortaleciendo, siga llegando con mejores herramientas’.

Los Gobiernos de Brasil y Bolivia también se han ratificado en su respaldo a Claver-Carone y en la fecha de votación del próximo fin de semana.
LAS CRÍTICAS A LA ELECCIÓN
A dos días de la votación en Washington, sede del BID, más de un centenar líderes de Latinoamérica y de Europa han reiterado sus llamados a que esa elección se aplace para después de las elecciones presidenciales en EE.UU., el 3 de noviembre, para ‘quitarle peso político’ al tema y que la región analice mejor cuál es el candidato más idóneo.

La Asamblea Parlamentaria Eurolatinoamericana (EuroLat) considera que no se están dando ‘las condiciones necesarias para un debate reflexivo’ sobre la elección en el BID y lamenta que la candidatura a ese puesto, que es ‘de una enorme trascendencia’, no haya sido el fruto de un debate y un posible consenso entre los Estados miembros de la organización.

EuroLat se suma a varios llamados a que la votación se posponga hasta la celebración de la Asamblea de Gobernadores del BID, prevista para marzo de 2021 en Barranquilla, Colombia.

La ‘Mesa de Reflexión Latinoamericana’, como se denominan 133 políticos, académicos y empresarios, advirtió en una carta conjunta las ‘notables y justificadas inquietudes’ derivadas de ‘la inaudita presentación por parte de Estados Unidos de la candidatura’ de Claver-Carone.

‘Esta oportunidad debería servir también para confirmar formalmente que un ciudadano latinoamericano o caribeño debe ejercer la presidencia’ del BID, indicaron los firmantes de la misiva publicada a mediados de agosto.

El grupo destacó la importancia del carácter ‘interamericano de la institución y la necesidad de mantener ese enfoque para ayudar a los países a la realidad que afrontará la región tras la pandemia’.

En una declaración conjunta, el expresidente francés François Hollande y los antiguos jefes de Gobierno de España e Italia Felipe González y Massimo D’Alema, respectivamente, afirmaron que la Unión Europea (UE) debe respaldar la petición de aplazamiento de la elección.

‘El desafío es preservar los equilibrios garantizados durante décadas en torno a los principios fundamentales del multilateralismo’, según los cuales un latinoamericano siempre ha presidido el BID, señalan los tres ex gobernantes en su declaración.

González, Hollande y D’Alema recordaron que el Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores, el español Josep Borrell, también ha pedido a los países del bloque europeo que voten ‘la postergación de esta decisión’.

En ese mismo sentido se pronunciaron también, los presidentes de la Fundación Euroamérica y de la Fundación Iberoamericana Empresarial, Ramón Jaúregui y Josep Piqué, respectivamente, quienes alertaron sobre ‘la conflictiva situación creada en el BID con la propuesta norteamericana y nos alarman sus consecuencias’.

Un total de trece Estados miembros de la Unión Europea y otros tres países europeos no miembros del bloque son miembros del BID y tienen derecho de voto en esa institución financiera multilateral.

La expresidenta de Costa Rica Laura Chinchilla retiró la semana pasada su candidatura al BID, por cambios ‘abruptos’ en las reglas del proceso de presentación y selección en toda la historia del organismo, que se fundó a finales de la década de 1950.

Chinchilla recordó que, según la regla, la presidencia la ocuparía siempre un país latinoamericano o un caribeño y la vicepresidencia un estadounidense. Sin embargo, el Gobierno de EE.UU. decidió ‘alterar esa norma que estuvo vigente por 70 años’, sin que previamente mediaran procesos de consulta y presentó un candidato propio.

La decisión de la ex mandataria fue respalda por el Gobierno de Costa Rica, que resaltó la necesidad de una ‘gobernanza eficiente y transparente, que promueva el respeto a la institucionalidad’ en el BID.
LA ALTERNATIVA ARGENTINA
Argentina ha sido el país que más se ha opuesto a la candidatura de Claver-Carone. El Gobierno de Alberto Fernández, que postuló al cargo a Gustavo Béliz, cuestiona esa aspiración ‘desde el punto de vista político, porque expresa el ala más dura de la ideologización de la política de Estados Unidos de su mirada hacia América’.

El canciller argentino, Felipe Solá, argumentó que el reglamento del BID establece que su presidente debe ser elegido en la asamblea anual ordinaria del organismo, cita que este año se iba a celebrar en Colombia y que, por la pandemia, fue postergada hasta marzo de 2021.

Solá ha lamentado en varias ocasiones el apoyo que Uruguay, Brasil y Paraguay, países socios de Argentina en el Mercosur, le dieron a Claver-Carone, y señala que es ‘una muestra de la desarticulación’ que hay sobre ‘cuestiones externas’ del bloque suramericano.

Mientras que Perú y varios países del Caribe están aún indecisos y dicen mantenerse aún en análisis y reflexión sobre todas las opciones, tanto la de apoyar a uno de los dos candidatos o la de aplazar las elecciones para el otro año.