Marino Ramírez Grullòn
La historia de la renovación partidaria interna refleja la inercia que han vivido por mucho tiempo esas organizaciones.
Cada vez que una entidad entra en crisis por razones varias como son: Pérdida del poder administrativo, divisiones internas o renuncias de sus principales líderes, comienzan a hablar de renovación interna aunque los métodos utilizados son bastantes cuestionados.
En su momento el entonces líder del otrora Partido Revolucionario Dominicano, José Francisco Peña Gómez ampliaba los organismos principales de esa organización pero sin realizar elecciones internas.
Eso llevo a que el Comité Ejecutivo Nacional del PRD llegara a tener hasta dos mil miembros lo que hacía imposible que se reuniera.
Pero había que complacer los grupos internos y nada mejor que ampliar desmesuradamente sus órganos de decisión.
Los reformistas hacían lo mismo hasta que se fue disminuyendo adquiriendo casi dueño particular debilidad que afecta a los demás grupos partidarios nacional.
Ya el PRD actual vive la misma situación, poca militancia, poca incidencia, los eventos internos no tienen peso específico.
El Partido Revolucionario Moderno, en el poder no visualiza una crisis interna, habrá que esperar cuáles serán los métodos de renovación mientras esté en el poder, aunque supongo que apelarán a la democracia interna para mantenerse a flote y darle participación a su membresía en sus decisiones internas.
Lo grave está pasando en el Partido de la Liberación Dominicana, el más fuerte de la oposición y que estuvo gobernando hasta recientemente.
Allí aunque no salga hay muchos disgustos toda vez que la elección del comité central y político no será hecha por la membresía sino prácticamente de dedo.
Es decir al comité político lo escogerá el comité central, y al comité central se podrá llegar por recomendación no por elección amplia y democrática.
Ante esta situación las quejas se han dejado sentir y entre público o privado la militancia del PLD reclama democracia ante una elección tan importante.
El problema es que los que están y disfrutan del poder interno dentro del partido morado no quieren ceder. Entonces veremos si el PLD avanzará o retrocederá ante este evento de gran importancia interna.