Por Milton Olivo
Los dominicanos debemos reflexionar en la conveniencia de escoger una provincia, para establecer un sistema federal. Donde la población, escoja su gobernador, se le asigne su presupuesto y organice sus ministerios.
Desde 1844, en RD, ha fracasado el sistema centralizado, donde el presidente designa el gobernador y las iniciativas desarrollistas de las provincias. Es hora de delegarlo a la población provincial, facilitándole recursos y que estos designen su gobernador y demás autoridades.
Imaginar cada provincia, eligiendo su gobernador, establecer un Poder Legislativo honorario, formado por los regidores municipales, con las mismas atribuciones del Congreso Nacional, pero con autoridad Provincial. Y su presupuesto, sacarlo de la partida del inversión de Presupuesto. Nacional.
VAMOS A ELEGIR LA PROVINCIA DE MONTE PLATA COMO MODELO PARA SER FEDERALIZADA.- Por ser una de las provincias más pobres del país. Para usarla como laboratorio, para ver el funcionamiento del modelo federal. A ver el resultado práctico de elegir su gobernador, con su presupuesto.
IMAGINAR MONTE PLANTA CON SUS MINISTERIOS PROVINCIALES.- Ósea organizar sus propios ministerios, con los recursos humanos locales, desarrollando e impulsando sus propios planes de desarrollo. Para beneficio de la población provincial. Como alternativa descentralizada a lo actual.
Si este sistema centralizado en el presidente, establecido desde 1844 ha condenado RD y las provincias al subdesarrollo del presente, es hora de probar con otro modelo. Y el modelo alternativo, es el sistema federal. Donde las provincias designan sus autoridades y con sus recursos, aplican sus planes desarrollo y organicen sus propios ministerios provinciales con los profesionales y talentos locales.
Este siglo XXI, no es de los más fuertes, sino de los mas rápidos. De aquellos con más capacidad de adaptarse, de cambiar, de generar cambios, de innovar. Nosotros no podemos ser la excepción, con un sistema de organización centralizado, obsoleto, decadente e infuncional.
Es de locos, esperar resultados diferentes, haciendo las cosas de la misma manera. Y si este sistema donde el presidente designa las autoridades provinciales, ha condenado a nuestras provincias al atraso, subdesarrollo y miseria del presente, ya es hora del cambio. De cambiar.
El espíritu heroico y emprendedor innato del pueblo dominicano, nos condena a ser destinados convertirnos en una potencia emergente. Y lo lograremos! Y el camino, es maximizar la producción agropecuaria, construir agroindustrias para estar en capacidad de procesar nuestra agro producción, establecer centros de distribución en USA, CANADA, UNION EUROPEA, RUSIA y CHINA. Y construir las agroindustrias que necesitamos para sustituir importaciones por producción nacional.
El autor es candidato a Secretario General del PRM