Por Milton Olivo
Los Taínos llegaron a la isla de Quisqueya alrededor del 6 mil AC. Los Europeos llegaron a la isla en 1492, quienes luego trajeron negros, de esa mezcla nace el pueblo dominicano de hoy. Los Haitianos, son o fueron los africanos traídos por Francia, a partir de 1777, después del Tratado de Aranjuez para ser esclavizados.
El conflicto, desconfianza y rechazo de RD hacia los Haitianos, nace a partir de sus múltiples invasiones al territorio dominicano en 1801, 1805, 1822, 1844, 1849, 1855 y las masacres y genocidios ejecutados. República Dominicana, nunca ha invadido Haití solo ha sido su víctima.
El drama haitiano, es fruto del nivel de evolución de los individuos originales. Su diferencia de origen tribal, con lenguajes y cosmovisión diferente, su sangrienta historia y su incapacidad de compartir una cosmovisión existencial, que les permita conciliar una visión de desarrollo compartida, más lo primitivo de su mentalidad que se refleja en la ferocidad criminal de su carácter.
El problema haitiano, es un drama humano que por caridad cristiana debe asumir América. No solo RD como hasta hoy. Su drama de incomprensión entre ellos es tal, que queda reflejado en las palabras del ex presidente haitiano Raúl Cedras, cuando expresó: «Para poner 3 haitianos de acuerdo en algo, hay que matar dos”.
Para colmo, tienen un territorio deforestado, inviable, con la mayor parte de sus terrenos improductivos y limitadas reservas de agua. En un momento recorrí Haití y regresé con el corazón roto, por el hambre existente.
Creo la ONU y la OEA, deberían crear mecanismos para que vuelvan a su hogar de donde fueron secuestrados, áfrica. Y diligenciar los reciba algunos de sus múltiples países con amplios territorios y escasa población.
República Dominicana es una sociedad pacifica, en desarrollo constante, democrática, enfocada en conciliar para progresar, con un pueblo con un espíritu solidario, bondadoso, alegre. Pero que nadie quiera verlo en guerra, se transforman en guerreros peligros.
Y en la próxima explosión social de la R. Dominicana, además de que el pueblo resolverá definitivamente la invasión haitiana que sufre, aprovechará para hacer justicia social.
Resolviendo la causa de la pobreza dominicana, que es la concentración de la tierra existente. Que a partir de la fundación de la República Dominicana, supuestamente para todos, un grupo se quedó con lo valioso, toda la tierra, y al resto, solo le dejaron – como burla- el himno y la bandera. Qué son los mismos sectores que se benefician, y apadrinan, con acciones o con su silencio la invasión haitiana que sufre el pueblo dominicano.
Y si en el pasado, el pueblo derrotó a españoles, franceses, ingleses, haitianos y norteamericano, en el presente, por su territorio, su patria, su cultura, sus valores, y su integridad, el pueblo dominicano no tendrá inconvenientes de enfrentarlos de nuevo si es necesario.
El autor es escritor, historiador y político.