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Por Milton Olivo
La visita del senador estadounidense Marco Rubio a República Dominicana ha sido, sin duda, uno de los temas más comentados en las últimas semanas. Sin embargo, lo más llamativo no ha sido la agenda bilateral o los acuerdos alcanzados, sino el torrente de prejuicios, especulaciones y teorías conspirativas que inundaron las redes sociales incluso antes de que Rubio pisara suelo dominicano. Este fenómeno no es nuevo; es parte de lo que podríamos llamar la «contracultura del pesimismo», una tendencia que parece empeñada en cuestionar todo, incluso cuando no hay pruebas que sustenten sus afirmaciones.
La Contracultura del Pesimismo. En un mundo hiperconectado, donde las redes sociales amplifican cada opinión y rumor, la desconfianza se ha convertido en una moneda de cambio. Nadie pone en tela de juicio la honorabilidad del presidente Luis Abinader, pero, curiosamente, como algo hay que afirmar, sí se cuestiona la rectitud de su gobierno y la integridad de sus funcionarios basándose en meras presunciones. Este es el caso de la visita de Marco Rubio, que fue recibida con escepticismo y críticas antes de que se conocieran los detalles de su agenda.
La «contracultura del pesimismo» se alimenta de la desinformación y la polarización. En lugar de analizar los hechos, prefiere construir narrativas basadas en prejuicios y teorías conspirativas. Esto no solo distorsiona la realidad, sino que también socava la credibilidad de las instituciones y desalienta el diálogo constructivo.
Desmontando los Mitos sobre la Visita de Marco Rubio. Frente a esta ola de pesimismo, es importante destacar los aspectos concretos y positivos de la visita de Marco Rubio. Aquí algunos puntos clave:
1. Haití no es responsabilidad de República Dominicana.- Rubio fue claro al afirmar que «el problema de Haití es de los haitianos» Esto desmiente los rumores de que Estados Unidos presionaría a República Dominicana para que asuma la crisis haitiana o acoja refugiados. Por el contrario, se reafirma el respeto a la soberanía dominicana y se reconoce que la solución debe venir desde dentro de Haití.
2. Apoyo a la misión keniana en Haití.- Estados Unidos ha reiterado su compromiso de apoyar la misión liderada por Kenia para estabilizar Haití. Esto es crucial para la seguridad regional y demuestra que la comunidad internacional está dispuesta a asumir responsabilidades sin cargar a República Dominicana con una carga que no le corresponde.
3. Tierras raras y desarrollo tecnológico.-República Dominicana cuenta con reservas de tierras raras, un recurso estratégico para la industria tecnológica global. El cuerpo de ingenieros del ejército estadounidense ha confirmado su existencia y ha ofrecido asesoramiento para su explotación. Esto representa una oportunidad histórica para el desarrollo económico y tecnológico del país.
4. Lucha contra el narcotráfico.- Rubio elogió los avances de República Dominicana en la lucha contra el narcotráfico, reconociéndola como un aliado confiable en esta batalla. Esto refuerza la imagen del país como un actor serio y comprometido en la seguridad regional.
5. Cooperación en extradiciones.– República Dominicana es líder en la región en procesos de extradición, especialmente en casos de delincuencia internacional. Esta cooperación no solo fortalece la justicia, sino también las relaciones bilaterales con Estados Unidos.
Hacia una Cultura de Optimismo Razonable. Frente a la «contracultura del pesimismo», es necesario promover una cultura de optimismo razonable. Esto no significa ignorar los problemas o caer en un triunfalismo ingenuo, sino basar nuestras opiniones en hechos concretos y en un análisis serio de la realidad.
La visita de Marco Rubio no fue un acto de opresión imperial, como algunos quisieron hacer creer, sino una oportunidad para fortalecer las relaciones bilaterales y explorar nuevas áreas de cooperación. En lugar de dejarnos llevar por el pesimismo, debemos celebrar los avances y trabajar juntos para enfrentar los desafíos que aún persisten.
La «contracultura del pesimismo» es un fenómeno peligroso que nos distrae de lo realmente importante: construir un futuro mejor para todos. La visita de Marco Rubio y los acuerdos alcanzados son una muestra de que, cuando se actúa con transparencia y basándose en hechos, es posible lograr resultados positivos para el país.
Es hora de dejar atrás los prejuicios y las especulaciones infundadas, y enfocarnos en lo que realmente importa: el desarrollo, la seguridad y el bienestar de todos los dominicanos. Solo así podremos construir una sociedad más justa, próspera y optimista.
De nosotros, de la sociedad, los partidos políticos y de nuestros líderes responsables como el presidente Luis Abinader, toca crear e impulsar las acciones y reformas o leyes necesarias e inteligentes para que el interés nacional esté protegido, y nuestras riquezas no se conviertan en un boomerang contrarios al interés nacional como ha sucedido en otras naciones.
El autor es escritor, novelista y activista por una Quisqueya potencia.